miércoles, junio 19, 2013

Caminando entre animales


Ni puedo ni quiero legislar, ni puedo ni quiero engañar a nadie, pero desde antes incluso de que abandonase este empeño de corte liberal - conservador algo ingenuo llamado en un principio con el pomposo nombre de El Eterno Retorno de la Libertad y, después de cercenado, con el manido nombre de Eterno Retorno (que vale para para un roto y para un descosido filosófico-existenciales), sentía un gran interés por esas otras leyes menos sujetas a la voluntad y el arbitrio humanos que hacen que todo lo humano -de los actos más abyectos a los más elevados productos de nuestra autoalabada razón- sea posible. La naturaleza humana se ha ido volviendo con el tiempo el principal objeto de mi interés. Mi naturaleza, en fin, se vuelca en sí misma, y yo, animal, siento que camino entre animales. 

Si algún visitante tuviera interés en mi peregrinaje evolutivo puede acudir a Caminando entre animales. Desconozco si se trata de la última etapa en un camino por otra parte bastante imaginario sobre un terreno virtual, o de un recodo cualquiera pero, sea una cosa u otra, la ignorancia de  lo que está por acaecer o aparecer, es parte del encanto de cualquier viaje.