miércoles, febrero 22, 2006

Cruzada contra la Cruz

En España hay Vampiros. Si, amigos, han de proveerse de inmediato en las tiendas del barrio de una estaca de madera afilada y de una ristra de ajos, pasar por la Iglesia para obtener un frasquito con agua bendita, poner un espejo delante de los extraños para ver si tienen reflejo, y no salir de noche. Y no olviden la CRUZ, ese símbolo que tanto espanta a esos chupasangres necesitados de la nocturnidad.

Se ha localizado un primer foco en Valladolid, aunque se cree que no será el último. Parece ser que los Vampiros en cuestión salieron a la luz pública (que no a la del sol, con la cual se hubieran desintegrado irremisiblemente) con motivo de unos pequeños y (aparentemente) inofensivos crucifijos colgados de las paredes de un colegio público de esta región. Debido a su delicada naturaleza, no podían, estos Vampiros, soportar la presencia de esa forma, debido no a la materia de la que está hecha, sino al espíritu que la alienta. Una divinidad que ellos rechazan desde el fondo del abismo de su vacío les miraba penetrante a través de ese cruce de rectas, de esa simetría inmaculada. Sus hijos, al igual que ellos, no podían contemplar el único espejo en el que podían ver reflejada su esencia. Su antítesis les mostraba por contraste lo insondable de su miseria.

¡Tampoco es para tanto! me diréis, un tanto inquietos. Se trata solamente de unos Fundamentalistas Laicos. No se ha constatado que chupen la sangre de nadie. Pero ay, queridos corderos, estos "lobos" no nos devoran de un solo mordisco, ni en un solo banquete. ¡Por eso han sido identificados como Vampiros y no como Hombres Lobo!. Chupan la sangre poco a poco, día a día, y nos dejan con vida para que sigamos alimentándoles. ¿Que de qué estoy hablando?: del parasitismo paraestatal. Pues los mismos que se indignan rabiosamente ante las humildes cruces no tienen reparo en vivir a costa de los demás ciudadanos a través del monstruoso aparato del Estado. ¿Creéis que vuestros impuestos no financian sus organizaciones supuestamente cívicas?.

Ahí están, rabiosos, enfurecidos, obsesionados, histéricos, bramando contra unas cruces de madera en nombre de una laicidad Robespierreana. Primero se rompen crucifijos, después se queman iglesias, al final se cortan cabezas o se tortura en checas. La masonería y el guerracivilismo posmodernos no descansan. Bajo la bandera de la laicidad se esconde la miseria del anticlericalismo, y esta oculta, más atrás, la aún más profunda miseria del relativismo autodestructivo.

Se dice que el mismo Conde Drácula aún está entre nosotros, que habita en su Castillo-Palacio, al que ahora llaman Moncloa. Desde él prepara la ofensiva final contra la patria, el Estado de Derecho, la libertad, la misma democracia en nombre de la cual dice hablar, y, por supuesto los valores. No, no digo la Religión. ZP ataca a los valores. El ataque al cristianismo se enmarca perfectamente en ese ataque global contra los valores. ¿O acaso ataca al Islam?...¡¡Por Dios, pero si está de rodillas!!....y no ante el Dios de los cristianos, sino orientando su genuflexo cuerpo a la Meca. No, definitivamente no ataca la Religión.

Él, Rey de la nocturnidad, Rey de la noche, Maestro del lado oscuro, Mal en su estado puro, opera en la negritud poscrepuscular de sus conciliábulos siniestros, diseñando un futuro a su medida, un Reinado de mil años, una noche de los tiempos suspendida en el tiempo, un apocalipsis perpetuo, el mismo infierno.

Este monstruoso Akenatón o Heliogábalo del laicismo totalitario solo considera digna de su poder la más magnífica de las cruces, la del Escorial, que desea convertir en Museo Republicano. Las demás se las deja a sus hordas furiosas.

Estas trabajan subterráneamente, en esta labor de destrucción de cimientos, ahora, pidiendo a gritos que se quite de su vista la imagen de los pequeños crucifijos, que hiere su vista. Supongo que nada les herirán los velos, pues ocultan y esclavizan.

Así que nada, a la gente de bien, creyente o no, no le dejan otra opción que luchar, y vencer, como una vez dijera un brillante forero de Terra, bajo el signo de la cruz.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno. voy a por una cruz.